Contenedores de RPBI
Los contenedores para residuos peligrosos biológico-infecciosos (RPBI) son recipientes diseñados para el almacenamiento seguro de desechos contaminados con agentes patógenos en hospitales y clínicas.
Fabricados con materiales resistentes que evitan fugas, cuentan con cierre hermético y están claramente identificados con el logo RPBI para garantizar su manejo adecuado.

Todo lo que Necesitas saber sobre Contenedores de RPBI
Consulta la siguiente sección para obtener respuestas a las preguntas más comunes sobre nuestros contenedores de RPBI.
¿Qué son los contenedores de RPBI?
Los Contenedores de RPBI (Residuos Peligrosos Biológico-Infecciosos) están diseñados para el manejo seguro y eficiente de residuos biológicos e infecciosos. Su fabricación debe cumplir las normativas respectivas para proteger la salud pública y el medio ambiente.
Fabricados con polímero de alta resistencia, estos contenedores son una solución eficiente y sostenible para el manejo de residuos en diversas aplicaciones y entornos, principalmente, en los entornos farmacéuticos y clínicos.
¿Qué son los residuos peligrosos biológico-infecciosos (RPBI)?
Los RPBI son residuos generados en actividades de atención médica que pueden contener agentes biológicos (como virus, bacterias o parásitos) de riesgo para la salud humana o animal. Según la Norma Oficial Mexicana NOM-087-ECOL-SSA1-2002, estos residuos incluyen: materiales contaminados con sangre, tejidos humanos, jeringas, agujas y material de curación utilizado para el tratamiento de personas enfermas, entre otros.
Existen diversos contenedores de RPBI destinados al desecho específico y por separado de cada uno de los diferentes RPBI
¿Cómo deben ser clasificados los RPBI?
Los RPBI deben clasificarse en categorías según su tipo y su nivel de peligrosidad. Según la NOM-087-ECOL-SSA1-2002, se dividen en las siguientes categorías:
- Grupo I: Residuos infecciosos, como fluidos corporales, sangre, y material quirúrgico.
- Grupo II: Residuos anatómicos (órganos, partes del cuerpo).
- Grupo III: Residuos cortantes y punzocortantes (jeringas, agujas, bisturíes).
- Grupo IV: Residuos químicos peligrosos (sustancias como productos de limpieza de hospitales)
¿Qué tipo de contenedores de RPBI deben usarse?
Los contenedores de RPBI deben ser rígidos, resistentes, impermeables, y con tapa de cierre hermético. Deben impedir la penetración y salida de líquidos u objetos punzocortantes en su interior.
Los contenedores deben ser de color rojo o amarillo, dependiendo si resguardan agujas, bisturís, navajas o residuos hematológicos, orina, excremento, sangre u otro líquido de riesgo biológico.
¿Dónde se deben colocar los contenedores de RPBI?
Los contenedores deben colocarse en áreas específicas y señalizadas dentro de las instalaciones generadoras de RPBI, como hospitales, clínicas, y laboratorios. Estas áreas deben estar aisladas de las zonas comunes y ser de fácil acceso para el personal exclusivo encargado de la recolección.
Los contenedores de RPBI deben situarse en zonas adecuadas para prevenir riesgos de exposición a los residuos peligrosos. Para esto, es recomendable colocarlos en sujetadores especiales.
¿Cómo deben ser etiquetados los contenedores de RPBI?
Los contenedores de RPBI deben llevar etiquetas claras y visibles que indiquen el tipo de residuo que contienen, así como el símbolo de «residuos peligrosos». La normativa correspondiente establece que la etiqueta debe incluir:
- El texto «Residuos Peligrosos Biológico-Infecciosos».
- Un pictograma con el símbolo de peligro biológico.
- Instrucciones de manejo y disposición final, si es necesario.
¿Cuánto tiempo se pueden almacenar los RPBI en los contenedores?
El almacenamiento de los RPBI debe realizarse de manera temporal, sin exceder los 30 días en las instalaciones donde se generaron. Durante este periodo, los residuos deben almacenarse de forma segura, en contenedores cerrados y ubicados en áreas que no presenten riesgos de exposición al personal o al público.
Si el almacenamiento supera los 30 días, los residuos deben ser transportados a un lugar de disposición final autorizado, de acuerdo con la NOM-087.
¿Qué hacer si un contenedor de RPBI se llena o se derrama?
Si un contenedor de RPBI se llena a su máxima capacidad (recomendado un llenado al 80%), este debe cerrarse de inmediato y trasladarse a un área de almacenamiento o tratamiento adecuado.
En caso de un derrame, se deben seguir protocolos estrictos de seguridad que incluyen:
- El uso de equipo de protección personal (guantes, mascarillas, gafas).
- Limpiar el derrame con productos de limpieza adecuados y seguros.
- Descartar los materiales de limpieza utilizados como RPBI, en contenedores adecuados.
¿Cuál es el procedimiento para la disposición final de los RPBI?
La disposición final de los RPBI debe realizarse de acuerdo con lo que establece la NOM-087-ECOL-SSA1-2002. Los métodos autorizados para la disposición final incluyen:
Incineración: permite destruir los residuos a través de altas temperaturas, asegurando que los agentes patógenos sean eliminados.
Tratamiento microbiológico: algunos RPBI pueden ser sometidos a procesos de esterilización, como la autoclave.
Disposición en rellenos sanitarios: únicamente en ciertos casos y bajo estrictas condiciones de control.
La disposición final debe realizarse a través de empresas autorizadas para el manejo y disposición de residuos peligrosos, asegurando que se cumplan todos los requisitos legales y ambientales.